Se empieza a cortar, esta vez por varios lados. Y se mete a la tina. Después de un rato, se queda dormida.

 

El agua ha evitado que la sangre seque... Martina se está desangrando... Abre los ojos de repente y se encuentra flotando en esa tina de agua roja, se siente débil... Y todos sus sueños le pasan por frente. Ella sabe que está muriendo y nadie la va a poder ayudar. 

 

Sabe bien que no podrá platicar de nuevo jamás con ese chico que tanto le gusta de la casa de enfrente, ya no podrá conocer parís, ni usar ese vestido rojo que tanto deseaba ponerse para su graduación... Y se queda de nuevo inconsciente.